Una charla masculina puede dar de sí lo que den ellos de sí. De manga ancha o de largo; son espectaculares en ideas, y por eso aunque nos pese mozas... Nos encanta.
Cuando ellos se crean una espectativa de mujer con ellos ( cuando se piyan, porque pa enamorarse son otro cantar)...Y digo otro cantar porque básicamente pueden piyarse de cualquier cosa que se asemeje a un porcentaje de nosotras, puede ser mucho o poco, pero ahí se mantienen. Nosotras en cuanto vemos que nos bajan del 40... nos empezamos a plantear otra alineación de plantilla.
Resulta que lo suyo es que estemos libre de pecado,( y ahora hablo de ellos) sino, arrieritos somos. Me refiero en resumidas cuentas a que ellos son más reacios claramente a no meterse en nuestros berenjenales de.. "separada, separada con hijos, viciosa, operada, libertina..." para ellos son etiquetas marujas.
Cosa que me encanta.
Aunque yo reconozco que de meterme en laberintos tengo el máster chef.
Por el contrario, pueden a no llegar analizar y prejuzgar, entonces es cuando empiezan a ser realmente felices con nosotras, en esto amigas, nos dan el palo.
Y es que muchas veces no vemos cómo entenderlos porque pensar como ellos puede llegar a ser lo más simple del mundo. Pero como somos tan sumamente inquietas de mente, nos sorprendemos por cada cosa que hacen; y a diferencia de ellos tardamos en que se nos vaya de la cabeza. Es decir, ellos dicen ..." Pepa es una golfa, por esto, por aquello..." y se acaba ahí, cuando les gusta Pepa, ella es maravillosa. Fin.
Nosotras no, en nuestra mayoría vemos una cagada acercándose de aquí a Lima, y no nos la quitamos de la cabeza... Hasta que pase el quinto año bisiesto. Ellos en esto, son más impredecibles, como buenas marujas.
Como en todo no se puede generalizar, pero para eso es mi camerino. Desde aquí digo que no escondo nada bajo la manga. Me gusta enseñar brazo, nunca sabes cuando tienes que hacer un corte de manga.
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